Cierra los ojos y por unos momentos desconecta tus sentidos del mundo material físico.
El mejor sonido, tu mejor canción, es la de tu corazón.
Talvez quieras irte a un lugar lejos de los estímulos constantes que vienen del mundo de afuera. Es cierto que menos cemento y más naturaleza proporciona una sensación de paz y de energía.
Pero, que tal si además, exploras esa sensación de paz en tu propio interior? como un hábito diario, estés donde estés, en tu cotidianidad. Si lo pruebas te darás cuenta que hallarás ese lugar dentro de ti.
“El que mira hacia afuera sueña, el que mira hacia adentro despierta” Carl Jung
Nada más tranquilo, placentero, seguro, verdadero e infinito que tu conexión con tu ser interior, ahi se encuentra la plenitud y el auténtico amor. Es ese refugio, tu único refugio del cuál jamás experimentarás abandono o soledad o todas esas emociones del alma que tratas de ocultar e ignorar con estímulos externos. El amor humano suele ser condicional, amor político; donde usamos poder sobre el otro y nos maltratamos desde la inconsciencia. Pero cuando conectas con tu interior, en meditación, en observación y silencio, te hallas en plenitud total. Nada falla allí, nada falta allí. Es verdadero, es la unión con todo lo que crees que te falta en este mundo físico. Allí no hay carencias, ni necesidades, ni miedos. Es experimentar a Dios, la conciencia que dirije todo lo demás, sabrás que nada de afuera te define, que cada rol que interpretas durante el día tiene un propósito más elevado para tu alma, que son trampolines para seguir nutriendo tu espiritu con cada aprendizaje y desafio.
Es lo que llamamos meditación, es en ese silencio donde hallarás las respuestas, es en ese silencio donde experimentas a Dios, que eres tu, tu ser real, la conciencia que dirige todo lo demás, la conciencia que te guía continuamente y te va ayudando a moverte en el mundo de los sentidos, cómo percibir la realidad y sus resultados, cómo interpretar y gestionar tus emociones, sentimientos y conductas, tus decisiones, tu caminar en la vida.
Como es adentro es afuera.
Es maravilloso y la vida se vuelve gozo en medio de todo, pues nada habrá cambiado afuera, pero todo ha cambiado adentro, de pronto te sientes en bienestar contigo, sabes que estás en completitud, te sientes en totalidad, te sientes en unidad.
Gracias por leerme